La compañía online de head hunters The Ladders habla de su eficacia en la selección de cargos directivos con una campaña de Fallon centrada en una cámara oculta.
¿Cómo reaccionaría la gente al ver 100.000 dólares encerrados en una urna de cristal en medio de un parque? Eso es lo que quiso averiguar Fallon cuando planteó una campaña para su cliente The Ladders, una empresa online especializada en la búsqueda y selección de altos cargos directivos.Los 100.000 dólares –falsos, por supuesto- fueron colocados en una urna de cristal en medio de Columbus Park, en el barrio neoyorkino de Brooklyn, aparentemente abandonados y realmente vigilados por 10 cámaras ocultas que recogieron las reacciones de los viandantes. La conclusión principal es que 100.000 dólares, que es el sueldo mínimo de los directivos que recluta Tha Ladders, atraen a mucha gente.Y esa misma conclusión se convirtió en el eslogan de la campaña: “100.000 dólares atraen a mucha gente pero Tha Ladder le ayuda a encontrar a las personas más adecuadas”.La acción llegó a provocar, incluso, la intervención de la policía cuando un grupo de personas consiguieron romper la urna de cristal en un acto de vandalismo.No es la primera acción de este tipo que se lleva a cabo como forma de promoción. 3M protagonizó una de las primeras y más notorias estrategias de este tipo cuando, para promocionar un vidrio de seguridad, colocó opis fabricados con ese material en la ciudad de Vancouver (Canadá) y en su interior colocó dinero real.
¿Cómo reaccionaría la gente al ver 100.000 dólares encerrados en una urna de cristal en medio de un parque? Eso es lo que quiso averiguar Fallon cuando planteó una campaña para su cliente The Ladders, una empresa online especializada en la búsqueda y selección de altos cargos directivos.Los 100.000 dólares –falsos, por supuesto- fueron colocados en una urna de cristal en medio de Columbus Park, en el barrio neoyorkino de Brooklyn, aparentemente abandonados y realmente vigilados por 10 cámaras ocultas que recogieron las reacciones de los viandantes. La conclusión principal es que 100.000 dólares, que es el sueldo mínimo de los directivos que recluta Tha Ladders, atraen a mucha gente.Y esa misma conclusión se convirtió en el eslogan de la campaña: “100.000 dólares atraen a mucha gente pero Tha Ladder le ayuda a encontrar a las personas más adecuadas”.La acción llegó a provocar, incluso, la intervención de la policía cuando un grupo de personas consiguieron romper la urna de cristal en un acto de vandalismo.No es la primera acción de este tipo que se lleva a cabo como forma de promoción. 3M protagonizó una de las primeras y más notorias estrategias de este tipo cuando, para promocionar un vidrio de seguridad, colocó opis fabricados con ese material en la ciudad de Vancouver (Canadá) y en su interior colocó dinero real.
